viernes, 26 de junio de 2009

zoo

Dale que nos acurrucamos un tanto así
como un elefante y un rinoceronte
escondidos detrás de un poste en el zoologico
confiadisimos en que nadie los ve.
No morimos justo antes de confesarlo todo
ante el ansioso público improvisado
que con pochoclo en mano quieren ver
como nos besamos descaradamente
en medio del lodo.
Así seguro que nos hechan del circo amor invertebrado
mejor portemosnos bien
que útimamente llegamos siempre tarde a nuestro número
y nos chocamos con todo en los apagones y los cambios de vestuario.
Amor-renacuajo convengamos que
aunque sea un rato
nos comportamos como si supieramos ser uno del otro
sin ser escandalosos ni pegotearnos con todo lo que tocamos.
Corazón de bestia del pantano intentemos comer
sin que la comida salga de nuestras bocas
que la gente se ríe
y nos mira raro y cree que es sabia por temerle a todo
y nos tira más comida por diversión
que igual comemos porque tenemos hambre
y se creen que por eso no tenemos dignidad ni orgullo.
Dale que nos miramos hasta que los ojos se salgan de las órbitas
las serpientes de al lado me miran de noche
y me da escalofríos
me quedo dormida en tu pierna gorda por las dudas.

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